8/7/07

MILITARIZACIÓN Y POLARIZACIÓN EN COLOMBIA MANIFESTADA A TRAVÉS DE UNA AGRESIÓN A UNA MUJER RUTA

DENUNCIA PÚBLICA

Quienes conocen a la Ruta Pacífica de las Mujeres, saben de su compromiso por la negociación política del conflicto armado y su no rotundo a la guerra. Desde siempre le hemos apostado a una ética de la noviolencia y hemos validado todos los esfuerzos que para la negociación del conflicto armado contemplen la urgencia de un acuerdo humanitario, el cese al fuego, el respeto por los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario. Como mujeres víctimas del conflicto armado, supervivientes de la guerra, actoras sociales y políticas, y constructoras de paz provenientes de todos los sectores sociales, hemos asumido la protesta y la movilización social como formas de resistencia y de acción social y política.

Con motivo de la movilización realizada el 5 de Julio/2007, atendiendo al llamado de los familiares de las víctimas y la necesidad de seguir pronunciándonos una vez más:

-CONTRA LA GUERRA Y TODAS LAS FORMAS DE VIOLENCIA,
-CONTRA EL MILITARISMO, EL SECUESTRO YEL RESCATE A SANGRE Y FUEGO,
-POR EL DESPEJE QUE PERMITA UN ACUERDO HUMANITARIO,
-LA LIBERACIÓN DE TODAS Y TODOS LOS SECUESTRADOS Y UNA SALIDA NEGOCIADA DEL CONFLICTO ARMADO.

Participamos de lo que entendimos una manifestación pública en la Plaza de Bolívar de Bogotá, en la cual debía tener espacio la oposición a las posturas hegemónicas militaristas.

Con asombro sentimos la extrema militarización de lo que ha sido un lugar de protesta y movilización de la sociedad civil; las calles cercadas con vallas metálicas, el cordón de policías que impedían la entrada a la Plaza y la revisión de los mensajes de las pancartas como requisito para poder acercarse y participar, fueron señales claras de la utilización del dolor de las víctimas y familiares, la instrumentalización y manipulación de la movilización social y el poco sentido de paz y libertad con el que fue convocada esta jornada por parte del Gobierno Nacional.

En coherencia con nuestros postulados feministas, pacifistas y antimilitaristas, y ejercicio de nuestros derechos de movilización y expresión política, nuestra intuición y solidaridad como mujeres, logramos entrar a la Plaza de Bolívar con el mensaje claro de SI AL DESPEJE, POR EL ACUERDO HUMANITARIO plasmado en una gran pancarta. Al llegar, quienes paradójicamente propugnaban libertad! nos acorralaron con insultos y agresiones físicas, señalándonos como “guerrilleras”, “mafiosas”, “terroristas,” “mandaderas de las FARC.” Una joven compañera que sostenía la pancarta además de los insultos tuvo que soportar el puño de un hombre que enfurecido se lanzó sobre ella.

Aunque conocemos las estrategias de polarización y desinformación que enmarca la campaña oficial lanzada y reproducida por los medios masivos de comunicación con ocasión a esta jornada, y de manera general frente al conflicto armado; nos aterra, nos desborda y entristecen las expresiones de odio e intolerancia, la indolencia, indiferencia y PÉRDIDA DEL SENTIDO HUMANITARIO frente al dolor de las víctimas y familiares que quieren tener de regreso a esposos, esposas, hijas, hijos, amigas y amigos.

Al mismo tiempo nos aferramos, unimos y agradecemos las mayoritarias expresiones de solidaridad que se vivieron en las diferentes ciudades del país e incluso en Bogotá, las expresiones de RECHAZO AL SECUESTRO Y AL RESCATE A SANGRE Y FUEGO COMO FORMA DE RESPETO Y GARANTÍA DE DERECHO A LA VIDA DE LOS SECUESTRADOS Y SECUESTRADAS, Y POR EL DESPEJE QUE PERMITA UN ACUERDO HUMANITARIO, LA LIBERACIÓN DE TODAS Y TODOS LOS SECUESTRADOS Y UNA SALIDA NEGOCIADA DEL CONFLICTO ARMADO.

¡NI GUERRA QUE NOS MATE, NI PAZ QUE NOS OPRIMA!

RUTA PACÍFICA DE LAS MUJERES
Bogotá, Julio 6 de 2007