20/12/08

Ruta Pacífica de las Mujeres repudia asesinato por parte del Ejército colombiano de esposo de lideresa indígena

Esta madrugada, en actuación criminal por parte de militares contra el vehículo de la consejera mayor Aída Quilcué, lideresa y negociadora de la Minga Indígena , fue asesinado su compañero Edwin Legarda, en una muestra clara de la persecución a las comunidades indígenas del Cauca.

Bogotá, 16 de diciembre de 2008. – Total rechazo al asesinato de Edwin Legarda, esposo de la Consejera Mayor del Consejo Regional Indígena del Cauca - CRIC, Aída Quilcué, expresó la Ruta Pacífica de las Mujeres, movimiento pacifista que repudia toda forma de violencia.

“Es inadmisible que miembros del Ejército asesinen a ciudadanos que presuntamente no atiendan una orden de pare en un retén. No es posible recurrir a la violencia y a la muerte para hacer cumplir una advertencia, y más siendo del conocimiento del personal militar del Cauca que el carro en movimiento pertenece a la Consejera Mayor Indígena. El uso de la fuerza y de las armas contra las colombianas y colombianos por parte del mismo personal militar es inaceptable”, señaló Marina Gallego Zapata, coordinadora Nacional de la Ruta Pacífica de las Mujeres.

Es así como este movimiento de mujeres manifestó su ABSOLUTO RECHAZO a este crimen, que evidencia el riesgo que afrontan las y los dirigentes indígenas en el país. “Hacemos un llamado a la sociedad civil, a la comunidad nacional e internacional para que se pronuncien por el respeto a la vida y a la autonomía de los pueblos indígenas, para que acompañen solidariamente al CRIC, y para que rechacemos con vehemencia la imposición de la guerra y la seguridad armada como la única vía para solucionar la crisis social y política del país”, precisó la Coordinadora Nacional de la Ruta Pacífica de las Mujeres.

Por su parte, las integrantes de la Ruta Pacífica en el Cauca y el movimiento Mujeres de Negro, realizarán esta tarde un plantón en rechazo a este crimen y como muestra de resistencia pacífica a la guerra, a la militarización de los territorios y a todas las violencias. "Las Mujeres creemos que la paz no proviene del poder de las armas ni de las amenazas, creemos que hoy más que nunca es necesaria la justicia, la verdad, la reparación y la reconstrucción de la esperanza”, puntualizó Marina Gallego Zapata.

“Por la Desmilitarización de la vida civil”